Plasencia

Ciudad del norte de Extremadura, perteneciente a la provincia de Cáceres. Es la cuarta población más poblada de la Comunidad y tiene mucho que ofrecer a los turistas que la visiten.

Entrada al colorido Valle del Jerte en primavera, Plasencia cuenta con un destacado conjunto monumental, declarado bien de interés cultural en 1958.

El acueducto de Plasencia cuenta con 55 arcos y traía el agua a la ciudad desde los pueblos de Cabezabellosa y El Torno.

La localidad tiene dos Catedrales, La Vieja y La Nueva. La primera, de estilo románico, fue construida en los siglos XIII y XIV. La segunda fue construida en el siglo XV y pretendía sustituir a la Vieja, pero por diversos motivos, se pararon los obras en 1760.

En La Plaza Mayor de Plasencia, se encuentra la casa Consistorial y el autómata conocido popularmente como el Abuelo Mayorga.

Los martes en el mercado, los agricultores y hortelanos, venden sus productos.

El Parque de La Isla es el pulmón verde de Plasencia con 10 hectáreas de extensión. Su piscina natural de casi 4 kilómetros, se sitúa entre el puente nuevo y el puente de la isla. Todo el “río chico” está encementado y cuenta con rampas para su acceso de baño. El agua es la del río Jerte, que llega desde la sierra de Gredos a través del valle del Jerte.

Un portugués en Villamañán

Está lloviendo en la localidad leonesa de Villamañán, donde muchos de sus vecinos están endeudados.

Por la autovía A66, circula un turista portugués. A causa de la lluvia decide parar en el pueblo. Entra al hotel y pone un billete de 100 euros en la mesa del recepcionista:

– Quiero una habitación, estoy harto de conducir con esta lluvia.

El recepcionista responde : – Ok, suba y escoja la que mas le guste, están todas disponibles y la llave esta en la puerta.

 El dueño del hotel se frota las manos. Coge el billete, y sale corriendo a pagar sus deudas con el carnicero. Inmediatamente el carnicero coge el billete y corre a pagar su deuda con el criador de cerdos.

 Este a su vez, corre a pagar lo que le debe al proveedor de alimento para animales. El vendedor de alimento coge el billete al vuelo y corre a liquidar su deuda con la prostituta, a la que hace tiempo que no paga. En tiempos de crisis, hasta ella da facilidades de pago..

 La prostituta se apresura, , coge el billete y sale corriendo hacia el hotel donde va con sus clientes . Lleva varios servicios sin pagar.

 Mientras ocurre todo esto, ha dejado de llover. El portugués, después de ver varias habitaciones, baja a la recepción y dice:

– Sabe que?. Como ha dejado de llover, me lo he pensado mejor y me voy. Tengo prisa por llegar a Miranda de Douro.

 – De acuerdo señor, dice el recepcionista, aquí tiene su billete y ya sabe que puede volver cuando quiera.

 Fíjate bien; nadie ha ganado ni ha perdido un Euro, sin embargo ahora nadie tiene deudas
.

 MORALEJA:

«SI EL DINERO CIRCULA SE ACABA LA CRISIS«.